LO QUE SE HEREDA
Victoria Linares Villegas (2022)
Texto de James Widdicombe
Estoy convencido de que en la fuente profunda del pasado que conocemos como historia, hay muchas historias no contadas, héroes no reconocidos e imaginarios inexplorados que nunca hubiéramos sospechado que existían. En su opera prima, Lo que se hereda (2022), Victoria Linares Villegas encuentra inesperadamente una de estas historias no contadas en el pasado oculto de su propia familia al descubrir que es pariente de Oscar Torres, un pionero del cine dominicano e izquierdista radical queer que fue borrado de la historia de su familia. La historia de Torres está desesperadamente fuera del alcance de Linares Villegas a pesar de su proximidad. En estas circunstancias, lucha contra la ausencia de huellas a través del juego imaginativo y la experimentación que une su mundo con el de Torres. De esta forma, la reconstrucción histórica da paso a la recuperación creativa. En esencia, Lo que se hereda es una película sobre los silencios en nuestras narrativas históricas, lo que se omite y lo que se registra, lo que se recuerda y lo que se olvida, y lo que estos silencios revelan sobre nosotros mismos.
Después de que Linares Villegas se entera de Oscar Torres a través de un comentario casual de su tía, emprende una búsqueda para investigar la vida de Torres. Su proceso se ve frustrado por la notoria falta de rastros de su vida; la mayoría de sus amigos han muerto (y los que sobreviven no saben nada de sus misteriosos últimos años), sus películas están disponibles sólo en copias espantosas y todas sus pertenencias fueron quemadas por su madre después de su muerte, excepto un álbum de fotos. En esta parte de la película, Linares Villegas confía en que el espectador se involucre en su fijación archivística para dar vida a esta historia. Aparte de sus considerables méritos cinematográficos, la película es un documento de importante significado histórico y, con suerte, una señal de un mayor trabajo histórico en el cine dominicano.
Cuando los medios tradicionales de investigación fallan, Linares Villegas recurre al juego imaginativo y la auto-indagación cuando descubre paralelos en su vida con la de Torres. El sentimiento de no pertenecer de Torres como izquierdista queer refleja la propia alienación de Linares Villegas de su familia y su país. En una secuencia brillantemente editada, Victoria se fusiona con Oscar a través de la actuación y la animación que reconstruye episodios de la vida de Torres. En esta parte de la película, la fijación de archivo da paso a un collage imaginativo que involucra animación, recreación, filmación de guiones de Torres, y le da vida a los pocos rastros que quedan de él. De esta manera, la película revela la fragilidad de la memoria histórica incluso en una era de archivo.
A través de esta autoetnografía, la película se aventura hacia una meditación más amplia sobre el legado autoritario de Rafael Trujillo que aisló a generaciones de voces opositoras del lugar que les corresponde en la historia. Linares Villegas descubre que Torres se vio obligado a exiliarse ya que fue perseguido por el régimen de Trujillo por su política comunista. En un momento poderoso, Linares Villegas lee una crítica mordaz del trujillato escrito por Torres que dice: “el trujillato no destruye lo creado. Troncha lo que está por nacer, que es mucho peor.” Los silencios que plagan la historia dominicana no son un accidente, fueron construidos en el tejido mismo de un régimen que impidió el florecimiento de la creatividad dominicana y de voces críticas que apuntaran a horizontes más amplios. En este contexto, Lo que se hereda pretende recuperar aquello que nunca se perdió, porque nunca se le permitió existir.
Como película intimista, Lo que se hereda nunca deja de resaltar la memoria personal y el trauma familiar. De hecho, el espectro del último cortometraje de Linares Villegas, Mi madre me tiene rabia (2019), se manifiesta en la película cuando se abre con imágenes de archivo de video de su infancia e involucra a su familia en su recreación lúdica al invitarlos a filmar guiones de Oscar Torres. El conservadurismo de la familia de Linares Villegas hoy en día se contrasta con el radicalismo de los miembros de su familia en el pasado; sin embargo, los silencios persisten como una herencia.
La fuerza de Lo que se hereda radica en su fe en el poder del cine para iluminar lo que ha quedado en la oscuridad y ser la voz de los silenciados. A nivel formal, esto se apoya en el montaje de Melisa Miranda que reúne elementos diversos en relaciones complejas que impregnan toda la película. Al mismo tiempo el elaborado diseño sonoro da vida a las reseñas de películas y guiones de Oscar Torres, dando profundidad a las recreaciones hechas por Linares Villegas. En su gesto más radical, Linares Villegas filma metraje de 16 mm que recrea el tipo de películas que hizo Torres. Por otro lado, la película desnuda sus propios dispositivos como construcción metacinemática; agregando un signo de interrogación a las exploraciones que hace Linares Villegas.
Lo que se hereda se estrenará en True/False Film Festival y BFI Flare: London LGBTIQ+ Film Festival. Victoria Linares Villegas ha sido una voz prometedora en el cine de autor dominicano desde sus aclamados cortometrajes como Cállate niña (2018) y Mi madre me tiene rabia (2019). Actualmente está trabajando en la postproducción de su segundo largometraje titulado El Ensayo.
